Discusiones sobre el Ghetto

Así que quieres trabajar en Panamá… y vienes del ghetto.

Hoy, martes 12 de marzo de 2013 tuvimos un fuerte debate en el trabajo (durante el almuerzo! … somos muy diligentes…) sobre las personas que viven en barrios populares luego de ver una noticia en la que unas familias exigían al gobierno les solucione el problema habitacional. Quien debatía conmigo, obvio que en términos cordiales, argumentaba que las personas que viven en pobreza están así porque no se le da oportunidad para trabajar, si ven en su hoja de vida que vive en ciertos lugares se le descarta inmediatamente; porque han tenido hijos temprano y otras causas. Mi punto era (y es) que mucho de eso tiene que ver con decisiones personales que afectan marcadamente el porvenir de una persona.

En Reclutamiento nosotros hacemos esfuerzos para conseguir la gente adecuada para nuestros clientes, sea internos o externos. Y sí, es un esfuerzo grande que requiere de muchas horas, paciencia, esperar a que asistan los candidatos, que vayan a la segunda entrevista. Conseguir referencias… y que sean buenas. Por lo que donde vive la persona sólo afecta si queremos una persona que viva cerca para su conveniencia y no sea que se vaya por que le resulta muy lejos. Quien argumentaba conmigo decía que a las personas que viven en los Ghettos no se les considera, a pesar que donde trabajamos, hay una consultora que es del Chorrillo, una de San Miguelito y yo que soy de Colón. Si quieren contar Juan Díaz, tienen otra muestra. Al menos a nuestro empleador no le molestó nuestra procedencia sino, nuestra capacidad. La mejor forma de avanzar socialmente, especialmente desde el primer escalón es mediante la educación. Cuando llegas al nivel de los que empezaron con más ventajas, resulta que ahora eres tú, por tu experiencia y tenacidad quien tiene mayores posibilidades.

Otro ejemplo, la semana pasada un hombre que de verdad le sirve un trabajo pronto llamó a la empresa, conversó con una compañera que le habló de una vacante que yo estaba manejando. El Sr. Propuso la entrevista para el mismo día y en esa tarde fue entrevistado. La hoja de vida me la hizo a mano. Lo pasé a WORD y lo referí. (El Sr. Es adecuado para el cargo, y tiene buenas referencias). Esta persona viene de un barrio en las afueras de Panamá, y fue seleccionado para la posición. Uno menos en las filas del desempleo que consiguió el trabajo porque lo merece.

Los hijos son una bendición dicen. Les creo. Desde el punto de vista económico, el cual es nuestro tema en este momento enfocándonos en hijos temprano. Vamos a definir temprano de una de dos formas: si tienes menos de 18, es temprano (vean este link que es preocupante); si no puedes mantenerlos, es muy temprano. Si no tienes estabilidad económica-laboral es probable que el hijo que nazca venga con serias limitaciones a la vez que restringe el ingreso disponible lo que impide que puedas lograr cosas como comprar una casa, si esa es tu meta, un carro o seguir la educación que como hemos hablado en este blog, es fundamental. Muchas personas despiertan luego que tiene hijos, maduran por la responsabilidad y prosperan. Algunas personas pueden continuar sin mucho inconveniente luego de haber tenido hijos hablando. Lo común es que las personas se retrasen al tener hijos antes de estar preparados para asumir la responsabilidad, lo que ocasiona que no puedan desarrollar una carrera que les permita criar mejor a sus hijos. Sumen a esto un fenómeno que se puede considerar normal en nuestra sociedad: las madres solteras. ¿Cuántas parejas se separan al instante que se conoce que la mujer está embarazada? Sólo una madre puede decir lo difícil que es criar a un hijo sola y muchas lo hacen valientemente, pero con la ayuda de la figura paterna los resultados pueden mejores.

Mi mensaje para la gente que “viene del Ghetto” y para todos los que leen este blog: Ustedes son responsables por sus propios actos y por ello de sus consecuencias. Y si puedo darles 2 consejos serían edúquense, eduquen a sus hijos y síganme en Twitter @17joeldiaz